domingo, 30 de marzo de 2008

Friki

Hoy quiero mostrales las fotos de un miembro muy importante de la familia. Nuestro perrito FRIKI. El es una animalito muy jugueton y peludo aunque lo que mas llama su atencion aparte de su carita dulce es su tamaño. Es un perro de raza maltes y de tamaño mini o Toy (como le llaman algunos). A friki le necanta jugar y perseguir a la familia. Como veis en esta foto tiene una carita para comerselo.

Aqui esta friki en su baño, como vereis parece como si todo el perro se fuera por la cañeria.

En esta foto friki sale con su regalo, un jersey que le hiso una amiga del trabajo. Incluso tiene un bolsillito para sus cositas.

Por ultimo Friki en una visita al canal olimpico de barcelona donde anduvo por primera vez suelto. Se lo paso en grande y durmio todo el camino de vuelta a casa.

viernes, 28 de marzo de 2008

Un video de un crack del futbol

Este video lo hicimos con Ramon de regalo para mi hermanito Nico. Aunque yo creo que lo disfruta mas mi padre.

Una gran visita

Hace unos dias vinieron a visitarme unos amigos de argentina. Que recuerdos, y momentos que hemos pasad. La vida nos ha cambiado mucho desde que me fui de argentina cuando tenia 11 años, él se ha casado con una chica genial lista y guapa y sobre todo simpatica.Vinieron de vacaciones a europa y nos hicieron una visita. Lo primero que hicimos con Ramon (mi marido) fue el arreglar la casa a fondo y con ello la habitacion de invitados. Los fuimos a buscar al aeropuerto y no hemos dejado de salir y visitar juntos Barcelona. El primer dia de excuersion yo me fui a trabajar temprano y ellos se fueron a Barcelona cuando sali nos encontramos en la plaza Urquinaona. Paseamos por el gotico y luego al museo de cera, la verdad vaya timo que es, tomamos algo en el Bosc de les fades, y luego fuimos a buscar al patry a su trabajo caminamos ramblas direccion la fnac y luego de dar una visita por la tecnologia (cosa que ha Walter le encanta) fuimos a cenar. El otro dia era viernes me fui temparano al trabajo y luego cuando sali fuimos a comer a Can Frai, despues fuimos al aquario de barcelona como siempre impresionante,cenamos una pizza en casa.
Sabado nos esperaba un dia duro, desayunamos tarde en casa y nos fuimos a Tibidabo subimos hasta lo mas alto, y luego al parque Guell. Fuimos a casa para descansar ya que por la tarde ibamos a visitar a mis padres ahi estaba mi tio y mi abuela nadien los invito pero ahi estaban.
Domingo fuimos a Sitges y comimos una fideua, por ultimo el Lunes que me pedi fiesta fuimos a montserrat estaba todo precioso pero la despedida se acercaba asi que al volver nos pusimos arreglar las cosas para el otro dia yo para trabajar y ellos para su viaje. Al otro dia nos levantamos todos pronto y nos despedimos la verdad es que me dio mucha pena pero me alegra saber que algun dia nos volveremos a ver.

miércoles, 12 de marzo de 2008

las clases de hogwards

Las clases en Hodwards
Al otro día empezaron las clases, los chicos fueron a la clase del profesor Flint antes de entrar los tres chicos vieron a Ktrin sentada al lado de Malfoy hablando con el, faltaban varios minutos para la clase.
- Si yo ya he aprendido algunos hechizos.- saca su varita y le tira windarbium leviosa a uno de los libros que estaban en la estantería, uno de los más grandes. Draco mira hacia arriba temeroso ya que es libro se encuentra justo arriba de él.
Patil Parkinson vio a Draco con el libro de repente salta de una sola ves por encima de todas las mesas de la clase y al llegar a donde estaba Draco con Ktrin, se pone justo delante de ellos y empuja a Malfoy hacia la pared con ella. Un segundo después el libro cae justo en el asiento de Malfoy causando un gran estruendo.
-aah!! están bien?- dice preocupada Patil.
- Sí. eso creo.- parándose.- pero por que diablos hiciste eso!?
- No lo has visto! Por poco y te mata ese libro!- Que irresponsable eres!- dice esto mientras le quita la varita de las manos- que hubiera pasado si yo no hubiera estado aquí! Seguro que ya estaría aplastado!
- Lo. lo siento pero la culpa fue tuya por desconcentrarme- luego de decir esto le tira la varita al suelo y se va caminando a su respectivo pupitre junto a las miradas de todos. En eso el profesor entro a la clase pasando por el pasillo.
- Estas bien?
- Lo siento puse tu vida en peligro.
- Bueno eso le pasa a cualquiera...- recogiendo la varita del piso- creo que deberías practicar mas.
- Ah gracias, has sido muy bueno contigo.- cogiendo la varita.
- No es nada
- Cómo puede ser amiga de Draco Malfoy!?! .-dijo Hermione a Harry que tenia a su lado.
- Es una pena por ella.
- Bueno, quizá no sea tan pesado…- Dijo Harry para buscar una explicación.
- o ella es igual de mala......- mientras tomaba apuntes de clases decía Ron en voz baja.
- Bueno, las apariencias engañan.
- Creo que Draco trama algo... y más encima con Ktrin.
- Sí!!! Ella es nuestra... –subiendo la voz Ron.
- Si tú lo dices...
- Par de pervertidos!- Les dijo Hermione hechandoles una mirada fulminante.
- Yo no, fue Ron. -Dijo Harry rápidamente.
Al salir de clases los tres chicos se acercaron a Ktrin
- Hola Ktrin.- Dijo Harry poniéndose a la derecha de ella.
- Hola Harry, Hola chicos.- les dedico una gran sonrisa.- ¿Cómo están?
-¿Qué hacías con Malfoy?
- Pues hablar nos encontramos en el desayuno y luego fue muy amable en acompañarme a clase.- los chicos la miraron con cara de no entender nada. En eso apareció Oliver Wood.
-Potter mañana hay entrenamiento de Quiddich, no faltes.
-Quiddich, he oído hablar mucho de el pero nunca lo he podido ver ¿puedo ir a veos?
-Claro que puedes.- A Wood se le ilumino la mirada, detrás de el aparecieron Fred y George.
-Nosotros te explicaremos cualquier duda que tengas, estamos en el equipo.- Los tres intentaban atraer la atención de ella.
-Venga chicos, recuerden que tenemos pociones, y no quiero darle motivos a Snape para que nos quite puntos.
Los chicos fueron los primeros en bajar a las mazmorras donde se dictaban las clases, ya que no querían encontrarse con Malfoy, y sus protectores Crabe y Goyle.
Al llegar vieron que la puerta que daba al aula de Pociones estaba abierta y su profesor, Snape, estaba adentro hablando con el director del colegio, Albus Dumbledore.
-Severus, se que es difícil pero debes escucharme, era factible que Voldemort lo encontrara...tiene seguidores por todo el mundo, huyó por mucho tiempo y al final, lo encontró...
Pero profesor... -contestó Snape con tono de suplica.
-Mira -dijo Dumbledore levantando el diario que tenía en la mano y mostrándole el titular de El Profeta -HAYAN ASESINADO AL DIRECTOR DE DURMSTRANG, IGOR KARKAROFF.
Dumbledore comenzó a leer la nota lentamente deteniéndose sólo para mirar a Snape:
-Ayer a media tarde, un Muggle del norte de Inglaterra dio aviso a la policía de que el cuerpo de un hombre yacía a unos kilómetros de su casa.
Después de la pericia policíaca se llegó a la conclusión de que no había rastro alguno de asesinato y, según la policía Muggle, la muerte podría tratarse un ritual de alguna secta que realiza sacrificios humanos...
Dumbledore se detuvo, Snape se había puesto pálido (más de lo de costumbre) y se tapaba la cara con las manos
-Debo seguir Severus...-dijo suavemente el director.
Snape asintió con la cabeza.
-Debido a la rareza de la muerte, se hizo presente el ministro de la magia, quien intentó interceder con los policías. El señor Cornelius Fudge dio cuenta, hoy a la tarde a El Profeta, de la identidad del cadáver, Igor Karkaroff, el ex director del colegio DURMSTRANG...
- ¿Profesor y cree usted que no la encontrara aqui? Sabe que traer a esa chica es un peligro para el colegio...
-Severus lo se, se quien es pero no podemos dejar que la encuentre fuera... en el mundo Muggle, ella desconoce muchas cosas, y con nuestra orientación y protección sabrá elegir lo mejor..
- ¿Como su madre?
-Tú lo has dicho como su madre, ella cometió muchos errores pero supo que elegir al final, tu la conocías bien, tu la ayudaste que escapara...
-¡Hola!, ¿Ansioso por empezar la clase Potter? -Draco Malfoy se hallaba detrás de ellos sonriendo con un fulgor en los ojos con sus dos protectores.
Harry y sus amigos se dieron vuelta asustados y los vieron allí, tan tontos como de costumbre.
-No, no estamos ansiosos por la clase, sino por hacerte tragar la varita -contesto Ron furioso porque lo habían asustado.
-No, yo no necesito comerme la varita, aunque...pensándolo bien, deberías guardar las tuyas, ya que dentro de un tiempo va a ser lo único que tengan para comer tú y tú patética familia -advirtió Malfoy.
Ron estaba fuera de control. Harry y Hermione trataron de detenerlo antes de que cometiera una locura.
-Pues si tanto dinero tienes, Malfoy, deberías utilizarlo para una cirugía de cerebro, aunque no creo en los milagros -chilló Harry.
Malfoy se había puesto colorado como un Wesley y se abalanzó sobre Harry.
-Disculpen...¿interrumpo algo? -el profesor Dumbledore había escuchado el alboroto y se había acercado para ver quienes eran los responsables -¡sepárense por favor! No quiero oír una sola queja de ustedes del profesor Snape...¿he sido claro?
-Si profesor, discúlpenos -suplicó Hermione.
Harry fulminó a Malfoy con la mirada y entró en el aula con sus amigos.
-Pociones para dormir será nuestro próximo tema, el cual será tomado en un examen sorpresa...
Harry y Ron se miraron y no hizo falta articular palabra, se entendieron rápidamente, Snape era un...
Cuando acababan el examen se retiraban de clases, muchos se fueron a los pocos minutos de empezar, no habían estudiado mucho y no era cosa de inventar por que si Snape deseaba podía castigarlos por inventar en sus exámenes o peor hacer que los lleven a prueba haciendo la poción y luego probándola con ellos mismos, las dos ultimas personas que quedaban en la sala era Hermione y Ktrin, Una vez que Hermione leyó varias veces su examen lo entrego dejando a Ktrin sola con Snape, cuando sonó el timbre de final de clases, se levanto y le entrego el examen a el profesor.
- Profesor Snape.
- ¿Desea algo señorita?
-Usted es ¿Severus Snape? Conocía a mi madre era amigo de ella.
- La conocía, pero no era amigo de una Gryffindor. -Dijo dándose vuelta y dándole la espalda mientras ella recogía sus cosas.
- Ella me dijo que si alguna vez lo veía que le diera las Gracias por todo lo que hizo por ella.- y se dio la vuelta y se fue cerrando la puerta, dejando a Snape sorprendido por lo que le había dicho.
Había sido un día muy largo. Después de pociones tuvieron Historia de la Magia y Botánica, pero ya habían terminado y se encontraban en la sala común, jugando al Snap explosivo con los mellizos.
-¡hey, Harry!, ¿crees que hocicos sepa algo de lo de Karkaroff? -preguntó Ron lejos de los oídos de sus hermanos y los demás..
-Lo dudo -respondió Harry pensativamente -¿será que donde se encuentra en estos momentos pudo escuchar la noticia?
Deberíamos avisarle, sabes que no le gusta que le ocultemos cosas y mucho menos que juguemos a los detectives.
Harry accedió y se dirigieron a la pajarera de las lechuzas para enviarle un mensaje a Sirius, padrino de Harry.
Hedwig los vio llegar y desplegó sus alas, pero Harry le hizo señas de que no era a ella a quien enviaría esta vez y ella ululó ofendida.
Eligieron a una lechuza marrón que parecía experta en entregar notas y escribieron el siguiente mensaje:
Querido Sirius:
Espero que estés bien y también buckbeak y no te preocupes por mi, ya que estoy muy bien.
Sólo quería informarte, si es que no lo sabías ya, que el día de ayer han encontrado el cuerpo de Karkaroff (ex director de Durmstrang)muerto en el norte de Inglaterra.
El profesor Dumbledore piensa que fue Voldemort, como modo de venganza. Eso es todo. Ron, Hermione y yo te enviamos nuestros cariños a ti y a Buckbeak.
PD: te extraño mucho padrino ¿cuándo volverás?
Harry
Cuando terminaron de enviar el mensaje ya era de noche y decidieron ir directamente al gran salón para cenar.
Comieron rápidamente porque estaban hambrientos y luego subieron a la sala común de Gryffindor donde se quedaron hablando con Dean y Seamus por más o menos una hora.
Se despidieron de sus compañeros y se dirigieron a su dormitorio. Al llegar a su cama, Harry vio que en ella había una carta, y creyendo que era la respuesta de su padrino, la abrió rápidamente:
Querido Harry:
Basta sólo con que me mires para que me pierda en tus ojos. Se que eres para mí y que yo soy para ti porque somos dos almas gemelas que se buscan por la vida. Perdona mi atrevimiento si te ofendo, pero al menos déjame soñar que estamos juntos.
-Tu enamorada secreta
Harry se puso colorado y se quedó duro de la sorpresa, es que era muy tímido y el sólo hecho de saber que una chica lo amaba en secreto, lo hacía temblar del susto.
-Harry, ¿qué te pasa, estás colorado?...Hola...¿hay alguien en casa? -se burló Ron.
-Mira,es..una..carta..de..amor -pudo articular Harry.
Ron leyó la carta detenidamente y cuando acabó miró a Harry seriamente durante cinco segundos, para luego reírse a carcajadas de lo lindo.
-¿Quién crees que me la pudo mandar?... -preguntó Harry algo temeroso y confundido
-No lo se Harry, lo único que se...jajaja -siguió riéndose -es que yo no fui...
Harry se había puesto verde del susto mientras Ron se retorcía en el piso descostillándose de la risa.
A la mañana siguiente, durante el desayuno, era más que evidente que Harry no había pasado una buena noche. Cuando él y Ron llegaron al gran salón, Harry pudo vislumbrar a Cho entre la multitud de la mesa Ravenclaw. No podía dejar de pensar que tal vez aquella enamorada secreta sería la chica que había llenado sus pensamientos desde segundo año, quizás era Ktrin que desde que la había conocido no había dejado de soñar con ella.
-Y...¿quién crees que sea, Cho o Ktrin? -le preguntó a Ron por segunda vez
-No lo sé, tal vez hay otra persona interesada en ti... -dijo mirando a Ginny
-¿Ginny?...¿tu crees que sea ella? -preguntó
-Puede ser, ¿recuerdas el día de San Valentín de segundo curso? -fue como si Ron se hubiese acordado de algo muy gracioso
-Cállate -dijo Harry enojado y a la vez tan colorado como Ron.
Ginny Wesley le había dedicado una poesía muy "particular" en su segundo año en Hogwarts, y es que, desde la primera vez que lo vio, estaba enamorada de él.
Ginny, al percatarse de su presencia, les dirigió una sonrisa muy dulce, y Harry, cambiando la cara de enojó por una de felicidad, se dirigió a donde ella se encontraba.
Harry se había pasado la mayor parte de su tiempo pensando en sus posibilidades amorosas que no se dio cuenta que el correo había llegado. Una lechuza marrón que había entrado por la ventana, como las otras, se dirigió hasta Harry y le entregó un pergamino doblado, con el nombre hocicos en el exterior. Harry, asombrándose de la rapidez con que su padrino le había contestado, tomo el pergamino y lo leyó en voz muy baja, junto con Hermione y Ron.
Querido Harry:
Yo también te extraño mucho y lo que más deseó en el mundo es que llegue la hora de estar contigo sin ningún peligro. Con respecto a lo de Karkaroff, sí, lo había oído de unos magos mientras buscaba comida convertido en perro. Tú manténte tranquilo y no cometas ninguna locura, Dumbledore se encargara de todo. Mientras estés en Hogwarts y al lado del profesor Dumbledore nada podrá hacerte el innombrable.
Cariños para ti, Ron y Hermione.
Hocicos
-Tiene razón -dijo Hermione al terminar de leer la carta -Dumbledore jamás permitiría que te hicieran algo, es una suerte que lo tengamos.
Harry asintió tristemente. Estaba apesadumbrado por la ausencia de Sirius.
Después del desayuno, acudieron a su primera clase de Transformaciones, con la profesora McGonagall, quien les mando transformar un conejo en un cenicero.
-¡Finigan!, ese cenicero tiene bigotes -aulló la profesora.
Era la primera hora de la tarde y todo quinto año de la casa Gryffindor ya se encontraba a la espera de Hagrid, el guardabosque y también profesor de cuidado de criaturas mágicas.
-¡Buenos días a todos! -dijo Hagrid -hoy les presentaré a la criatura que nos acompañara durante el año...¡Pancracio! y será nuestra nueva mascota.
Era un espécimen único, la mayor parte del cuerpo era de perro pero tenía nariz de cerdo y una dentadura de cocodrilo. Fang, perro de Hagrid, le revoloteaba alrededor muy intrigado olfateándolo.
Harry pensó que era simpático, si no se tenía en cuenta su feroz mandíbula, de la cual surgía un líquido gomoso que parecía ser saliva, y sus grandes uñas capaces de partir a cualquier hombre en miles de pedazos. Pasaron algunas semanas y el misterio de la enamorada de Harry seguía vigente. Había recibido para esa altura más de 12 cartas y todas eran anónimas. Harry no sospechaba quien podía ser su autora (esperaba solamente que no fuese Myrtle) pero por si acaso, cada vez que veía a Cho o a Ktrin , que se había hecho muy popular en el colegio, esbozaba una ridícula sonrisa, mezcla de galán superado y tímido reprimido.
Ron, no podía aguantar la risa cada vez que Harry lo hacía, y es que era más que evidente que debía quedar como un ridículo.
Además, algunas chicas de primero lo miraban de una manera muy especial y para que no lo tomaran desprevenido, también les sonreía a ellas.
Harry daba una postura de desinterés en conocer a su enamorada pero la verdad es que la duda lo estaba carcomiendo.
Wood les dijo que buscarían a un nuevo Guardián y que el tenia muchas veces que ausentarse para los entrenamientos y alguien que lo sustituya en algunos partidos, la selección comenzarían al día siguiente debido a que se acercaba la fecha de los partidos y necesitaban y lo necesitaban para el primer partido.
-¿Por qué no te presentas? Serías un buen guardián para Gryffindor -le dijo Harry a Ron
-¿Tu crees?, ¿crees que me darán el puesto?
-Con intentarlo no pierdes nada, además, si haces un buen trabajo, serás famoso y las chicas te perseguirán por un autógrafo...
No hizo falta ningún otro comentario. Ron corrió a anotarse en la lista de los que harían las pruebas inmediatamente Harry mencionó a las chicas y los autógrafos en una misma oración.
Al día siguiente, Wood convocó a todo el equipo de Quiddich de Gryffindor para reunirse en el campo de juego y así poder evaluar a los que solicitaban el puesto.
Todos se encontraban sentados en la parte baja de la tribuna entrevistando a cada postulante, mientras que Ron, esperaba ansiosamente para mostrar todas sus habilidades sobre la escoba el las gradas estaban Hermione y Ktrin, mas de uno de los postulantes se hacia el simpatico frente a ellas.
-Te has vuelto muy popular entre los chicos ¿No crees?.- Le decía Hermione mientras que miraban el campo.
-La verdad no es algo que me importe mucho, todo viene de herencia mi abuela era una veela (así se le llamaba a una raza de brujas que tenia una apariencia de una ninfa y poderes de un mago, son una rara raza)
-Y tu que Hermione ¡que pasa entre tu Harry y Ron? Estáis muy unidos.
Justo en ese momento Ron se subía a su escoba, era su turno para la prueba.
-Ahhh! -dijo Fred cuando lo vio a Ron -no se por qué pero este chico me resulta extrañamente familiar.
-Haber chico, dinos por qué quieres entrar en el equipo, ¿te consideras un ganador merecedor de ese privilegio? -continuó burlándose George.
Ron balbuceó un par de veces pero luego dijo decididamente:
- Sí, por supuesto. Soy un Wesley y la sangre ganadora corre por mis venas -dijo Ron con la frente bien alta del orgullo -si me toman no defraudaré su confianza.
- ah, por lo menos tiene confianza en si mismo, eso me gusta -prosiguió Fred - Haber chico, prepárate para darnos una demostración en la escoba.
-Sí, Angelina, ¿podrías por favor hacernos el honor de probar las habilidades de este joven?
Angelina Jhonson se levantó de la tribuna y se montó en la escoba. Ron la siguio y se preparó para detener todos los tiros que la cazadora Gryffindor le arrojase...
Ron tomó vuelo y se ubicó justo delante de los postes de Gryffindor, donde la cazadora Angelina Jonson le arrojaría unos tiros con la quaffle (una de las pelotas usadas en el Quiddich) y probaría si Ron era merecedor del puesto de Guardián de los postes del equipo.
Desde abajo se oyó un silbato que significaba que debía comenzar, y Angélica, con la precisión que la caracteriza, le arrojó la quaffle a Ron con todas sus fuerzas. No le costó mucho trabajo a Ron atrapar la pelota en aquella oportunidad, ni tampoco el hacerlo unas 20 veces más cuando todo el equipo de Gryffindor se dispuso a vencerlo y a anotar.
Era bueno, realmente bueno. Tenía técnica y una habilidad que no habían visto. Harry no había imaginado, ni siquiera cuando le había propuesto anotarse en el equipo, que Ron era tan bueno como guardián.
Quedó elegido de inmediato, e incluso los demás solicitantes del puesto, que no habían quedado, lo aplaudieron por la excelencia de su actuación.
Ron estaba hinchado de orgullo y Harry jamás lo había visto tan alegre y contento en los casi 5 años que lo conocía.
Ahora, ambos estaban en el equipo, había demostrado ser tan bueno como Harry y eso, tal vez, mejorara un poco la relación que había entre ellos. Al menos eso fue lo que pensó Harry.
Desde aquel día Ron se manejaba por el colegio con un porte especial, incluso cuando Malfoy y sus amigos se detuvieron en el vestíbulo para preguntarle, de muy mala manera, si es que la familia Wesley había pagado para tener a todos sus integrantes en el equipo. Ese tipo de comentarios no se hizo esperar y menos de los miembros de la casa Slytherin que no desaprovechaban la oportunidad de humillar a Ron y a Harry cada vez que podían.
El resto de las casas, sin embargo, no compartían su opinión: felicitaban a Ron a cada momento y le daban buenos augurios para el campeonato, el cual según la mayoría, ganarían sin esforzarse demasiado.
Nadie sabía como jugaba Ron, ya que las elecciones para el puesto de guardián se habían hecho a puertas cerradas y los únicos que conocían su talento eran los miembros del equipo.
Harry y Ron se sentían más unidos que nunca, y debido a esto, hicieron un juramento por demás importante: iban a patear el trasero de cada miembro de la casa Slytherin y derribarían a Malfoy de la escoba en el primer intento que tuvieran.
Los entrenamientos habían comenzado y mas duros que nunca. Harry había logrado atrapar la Snitch 9 de las 10 veces que habían jugado porque el último partido había sido suspendido por una lluvia muy fuerte y que los lanzaría de la escoba.
Ron cada vez era mejor, ya conocía prácticamente el destino de la quaffle antes de que se la arrojaran, tenía lo que se conoce como un sexto sentido.

Hagrid permaneció viéndolo hasta el final del ultimo entrenamiento antes del partido. Harry descendió de su escoba y se encaminó hacia él.
- Hola Hagrid ¿como estás? -preguntó algo ansioso
- Muy bien, aunque no tanto como tú jugando al Quiddich según veo -contestó.
Harry asintió algo incrédulo y se dirigió, con Ron, hacia el castillo, de camino vieron al padre de Draco, eso no era bueno pero también puede que haya ido a ver a su hijo antes del partido.
- Hey, Ron, ¿mira el padre de Malfoy?
-Si que estará haciendo aquí?
Harry, decidió no hacer caso de sus pensamientos y seguir su camino al castillo, era evidente que si algo pasaba, debía de ser efecto de su gran imaginación. Tantas veces habían vivido situaciones desagradables que ya estaba viendo visiones...

las clases de hogwards

Las clases en Hodwards
Al otro día empezaron las clases, los chicos fueron a la clase del profesor Flint antes de entrar los tres chicos vieron a Ktrin sentada al lado de Malfoy hablando con el, faltaban varios minutos para la clase.
- Si yo ya he aprendido algunos hechizos.- saca su varita y le tira windarbium leviosa a uno de los libros que estaban en la estantería, uno de los más grandes. Draco mira hacia arriba temeroso ya que es libro se encuentra justo arriba de él.
Patil Parkinson vio a Draco con el libro de repente salta de una sola ves por encima de todas las mesas de la clase y al llegar a donde estaba Draco con Ktrin, se pone justo delante de ellos y empuja a Malfoy hacia la pared con ella. Un segundo después el libro cae justo en el asiento de Malfoy causando un gran estruendo.
-aah!! están bien?- dice preocupada Patil.
- Sí. eso creo.- parándose.- pero por que diablos hiciste eso!?
- No lo has visto! Por poco y te mata ese libro!- Que irresponsable eres!- dice esto mientras le quita la varita de las manos- que hubiera pasado si yo no hubiera estado aquí! Seguro que ya estaría aplastado!
- Lo. lo siento pero la culpa fue tuya por desconcentrarme- luego de decir esto le tira la varita al suelo y se va caminando a su respectivo pupitre junto a las miradas de todos. En eso el profesor entro a la clase pasando por el pasillo.
- Estas bien?
- Lo siento puse tu vida en peligro.
- Bueno eso le pasa a cualquiera...- recogiendo la varita del piso- creo que deberías practicar mas.
- Ah gracias, has sido muy bueno contigo.- cogiendo la varita.
- No es nada
- Cómo puede ser amiga de Draco Malfoy!?! .-dijo Hermione a Harry que tenia a su lado.
- Es una pena por ella.
- Bueno, quizá no sea tan pesado…- Dijo Harry para buscar una explicación.
- o ella es igual de mala......- mientras tomaba apuntes de clases decía Ron en voz baja.
- Bueno, las apariencias engañan.
- Creo que Draco trama algo... y más encima con Ktrin.
- Sí!!! Ella es nuestra... –subiendo la voz Ron.
- Si tú lo dices...
- Par de pervertidos!- Les dijo Hermione hechandoles una mirada fulminante.
- Yo no, fue Ron. -Dijo Harry rápidamente.
Al salir de clases los tres chicos se acercaron a Ktrin
- Hola Ktrin.- Dijo Harry poniéndose a la derecha de ella.
- Hola Harry, Hola chicos.- les dedico una gran sonrisa.- ¿Cómo están?
-¿Qué hacías con Malfoy?
- Pues hablar nos encontramos en el desayuno y luego fue muy amable en acompañarme a clase.- los chicos la miraron con cara de no entender nada. En eso apareció Oliver Wood.
-Potter mañana hay entrenamiento de Quiddich, no faltes.
-Quiddich, he oído hablar mucho de el pero nunca lo he podido ver ¿puedo ir a veos?
-Claro que puedes.- A Wood se le ilumino la mirada, detrás de el aparecieron Fred y George.
-Nosotros te explicaremos cualquier duda que tengas, estamos en el equipo.- Los tres intentaban atraer la atención de ella.
-Venga chicos, recuerden que tenemos pociones, y no quiero darle motivos a Snape para que nos quite puntos.
Los chicos fueron los primeros en bajar a las mazmorras donde se dictaban las clases, ya que no querían encontrarse con Malfoy, y sus protectores Crabe y Goyle.
Al llegar vieron que la puerta que daba al aula de Pociones estaba abierta y su profesor, Snape, estaba adentro hablando con el director del colegio, Albus Dumbledore.
-Severus, se que es difícil pero debes escucharme, era factible que Voldemort lo encontrara...tiene seguidores por todo el mundo, huyó por mucho tiempo y al final, lo encontró...
Pero profesor... -contestó Snape con tono de suplica.
-Mira -dijo Dumbledore levantando el diario que tenía en la mano y mostrándole el titular de El Profeta -HAYAN ASESINADO AL DIRECTOR DE DURMSTRANG, IGOR KARKAROFF.
Dumbledore comenzó a leer la nota lentamente deteniéndose sólo para mirar a Snape:
-Ayer a media tarde, un Muggle del norte de Inglaterra dio aviso a la policía de que el cuerpo de un hombre yacía a unos kilómetros de su casa.
Después de la pericia policíaca se llegó a la conclusión de que no había rastro alguno de asesinato y, según la policía Muggle, la muerte podría tratarse un ritual de alguna secta que realiza sacrificios humanos...
Dumbledore se detuvo, Snape se había puesto pálido (más de lo de costumbre) y se tapaba la cara con las manos
-Debo seguir Severus...-dijo suavemente el director.
Snape asintió con la cabeza.
-Debido a la rareza de la muerte, se hizo presente el ministro de la magia, quien intentó interceder con los policías. El señor Cornelius Fudge dio cuenta, hoy a la tarde a El Profeta, de la identidad del cadáver, Igor Karkaroff, el ex director del colegio DURMSTRANG...
- ¿Profesor y cree usted que no la encontrara aqui? Sabe que traer a esa chica es un peligro para el colegio...
-Severus lo se, se quien es pero no podemos dejar que la encuentre fuera... en el mundo Muggle, ella desconoce muchas cosas, y con nuestra orientación y protección sabrá elegir lo mejor..
- ¿Como su madre?
-Tú lo has dicho como su madre, ella cometió muchos errores pero supo que elegir al final, tu la conocías bien, tu la ayudaste que escapara...
-¡Hola!, ¿Ansioso por empezar la clase Potter? -Draco Malfoy se hallaba detrás de ellos sonriendo con un fulgor en los ojos con sus dos protectores.
Harry y sus amigos se dieron vuelta asustados y los vieron allí, tan tontos como de costumbre.
-No, no estamos ansiosos por la clase, sino por hacerte tragar la varita -contesto Ron furioso porque lo habían asustado.
-No, yo no necesito comerme la varita, aunque...pensándolo bien, deberías guardar las tuyas, ya que dentro de un tiempo va a ser lo único que tengan para comer tú y tú patética familia -advirtió Malfoy.
Ron estaba fuera de control. Harry y Hermione trataron de detenerlo antes de que cometiera una locura.
-Pues si tanto dinero tienes, Malfoy, deberías utilizarlo para una cirugía de cerebro, aunque no creo en los milagros -chilló Harry.
Malfoy se había puesto colorado como un Wesley y se abalanzó sobre Harry.
-Disculpen...¿interrumpo algo? -el profesor Dumbledore había escuchado el alboroto y se había acercado para ver quienes eran los responsables -¡sepárense por favor! No quiero oír una sola queja de ustedes del profesor Snape...¿he sido claro?
-Si profesor, discúlpenos -suplicó Hermione.
Harry fulminó a Malfoy con la mirada y entró en el aula con sus amigos.
-Pociones para dormir será nuestro próximo tema, el cual será tomado en un examen sorpresa...
Harry y Ron se miraron y no hizo falta articular palabra, se entendieron rápidamente, Snape era un...
Cuando acababan el examen se retiraban de clases, muchos se fueron a los pocos minutos de empezar, no habían estudiado mucho y no era cosa de inventar por que si Snape deseaba podía castigarlos por inventar en sus exámenes o peor hacer que los lleven a prueba haciendo la poción y luego probándola con ellos mismos, las dos ultimas personas que quedaban en la sala era Hermione y Ktrin, Una vez que Hermione leyó varias veces su examen lo entrego dejando a Ktrin sola con Snape, cuando sonó el timbre de final de clases, se levanto y le entrego el examen a el profesor.
- Profesor Snape.
- ¿Desea algo señorita?
-Usted es ¿Severus Snape? Conocía a mi madre era amigo de ella.
- La conocía, pero no era amigo de una Gryffindor. -Dijo dándose vuelta y dándole la espalda mientras ella recogía sus cosas.
- Ella me dijo que si alguna vez lo veía que le diera las Gracias por todo lo que hizo por ella.- y se dio la vuelta y se fue cerrando la puerta, dejando a Snape sorprendido por lo que le había dicho.
Había sido un día muy largo. Después de pociones tuvieron Historia de la Magia y Botánica, pero ya habían terminado y se encontraban en la sala común, jugando al Snap explosivo con los mellizos.
-¡hey, Harry!, ¿crees que hocicos sepa algo de lo de Karkaroff? -preguntó Ron lejos de los oídos de sus hermanos y los demás..
-Lo dudo -respondió Harry pensativamente -¿será que donde se encuentra en estos momentos pudo escuchar la noticia?
Deberíamos avisarle, sabes que no le gusta que le ocultemos cosas y mucho menos que juguemos a los detectives.
Harry accedió y se dirigieron a la pajarera de las lechuzas para enviarle un mensaje a Sirius, padrino de Harry.
Hedwig los vio llegar y desplegó sus alas, pero Harry le hizo señas de que no era a ella a quien enviaría esta vez y ella ululó ofendida.
Eligieron a una lechuza marrón que parecía experta en entregar notas y escribieron el siguiente mensaje:
Querido Sirius:
Espero que estés bien y también buckbeak y no te preocupes por mi, ya que estoy muy bien.
Sólo quería informarte, si es que no lo sabías ya, que el día de ayer han encontrado el cuerpo de Karkaroff (ex director de Durmstrang)muerto en el norte de Inglaterra.
El profesor Dumbledore piensa que fue Voldemort, como modo de venganza. Eso es todo. Ron, Hermione y yo te enviamos nuestros cariños a ti y a Buckbeak.
PD: te extraño mucho padrino ¿cuándo volverás?
Harry
Cuando terminaron de enviar el mensaje ya era de noche y decidieron ir directamente al gran salón para cenar.
Comieron rápidamente porque estaban hambrientos y luego subieron a la sala común de Gryffindor donde se quedaron hablando con Dean y Seamus por más o menos una hora.
Se despidieron de sus compañeros y se dirigieron a su dormitorio. Al llegar a su cama, Harry vio que en ella había una carta, y creyendo que era la respuesta de su padrino, la abrió rápidamente:
Querido Harry:
Basta sólo con que me mires para que me pierda en tus ojos. Se que eres para mí y que yo soy para ti porque somos dos almas gemelas que se buscan por la vida. Perdona mi atrevimiento si te ofendo, pero al menos déjame soñar que estamos juntos.
-Tu enamorada secreta
Harry se puso colorado y se quedó duro de la sorpresa, es que era muy tímido y el sólo hecho de saber que una chica lo amaba en secreto, lo hacía temblar del susto.
-Harry, ¿qué te pasa, estás colorado?...Hola...¿hay alguien en casa? -se burló Ron.
-Mira,es..una..carta..de..amor -pudo articular Harry.
Ron leyó la carta detenidamente y cuando acabó miró a Harry seriamente durante cinco segundos, para luego reírse a carcajadas de lo lindo.
-¿Quién crees que me la pudo mandar?... -preguntó Harry algo temeroso y confundido
-No lo se Harry, lo único que se...jajaja -siguió riéndose -es que yo no fui...
Harry se había puesto verde del susto mientras Ron se retorcía en el piso descostillándose de la risa.
A la mañana siguiente, durante el desayuno, era más que evidente que Harry no había pasado una buena noche. Cuando él y Ron llegaron al gran salón, Harry pudo vislumbrar a Cho entre la multitud de la mesa Ravenclaw. No podía dejar de pensar que tal vez aquella enamorada secreta sería la chica que había llenado sus pensamientos desde segundo año, quizás era Ktrin que desde que la había conocido no había dejado de soñar con ella.
-Y...¿quién crees que sea, Cho o Ktrin? -le preguntó a Ron por segunda vez
-No lo sé, tal vez hay otra persona interesada en ti... -dijo mirando a Ginny
-¿Ginny?...¿tu crees que sea ella? -preguntó
-Puede ser, ¿recuerdas el día de San Valentín de segundo curso? -fue como si Ron se hubiese acordado de algo muy gracioso
-Cállate -dijo Harry enojado y a la vez tan colorado como Ron.
Ginny Wesley le había dedicado una poesía muy "particular" en su segundo año en Hogwarts, y es que, desde la primera vez que lo vio, estaba enamorada de él.
Ginny, al percatarse de su presencia, les dirigió una sonrisa muy dulce, y Harry, cambiando la cara de enojó por una de felicidad, se dirigió a donde ella se encontraba.
Harry se había pasado la mayor parte de su tiempo pensando en sus posibilidades amorosas que no se dio cuenta que el correo había llegado. Una lechuza marrón que había entrado por la ventana, como las otras, se dirigió hasta Harry y le entregó un pergamino doblado, con el nombre hocicos en el exterior. Harry, asombrándose de la rapidez con que su padrino le había contestado, tomo el pergamino y lo leyó en voz muy baja, junto con Hermione y Ron.
Querido Harry:
Yo también te extraño mucho y lo que más deseó en el mundo es que llegue la hora de estar contigo sin ningún peligro. Con respecto a lo de Karkaroff, sí, lo había oído de unos magos mientras buscaba comida convertido en perro. Tú manténte tranquilo y no cometas ninguna locura, Dumbledore se encargara de todo. Mientras estés en Hogwarts y al lado del profesor Dumbledore nada podrá hacerte el innombrable.
Cariños para ti, Ron y Hermione.
Hocicos
-Tiene razón -dijo Hermione al terminar de leer la carta -Dumbledore jamás permitiría que te hicieran algo, es una suerte que lo tengamos.
Harry asintió tristemente. Estaba apesadumbrado por la ausencia de Sirius.
Después del desayuno, acudieron a su primera clase de Transformaciones, con la profesora McGonagall, quien les mando transformar un conejo en un cenicero.
-¡Finigan!, ese cenicero tiene bigotes -aulló la profesora.
Era la primera hora de la tarde y todo quinto año de la casa Gryffindor ya se encontraba a la espera de Hagrid, el guardabosque y también profesor de cuidado de criaturas mágicas.
-¡Buenos días a todos! -dijo Hagrid -hoy les presentaré a la criatura que nos acompañara durante el año...¡Pancracio! y será nuestra nueva mascota.
Era un espécimen único, la mayor parte del cuerpo era de perro pero tenía nariz de cerdo y una dentadura de cocodrilo. Fang, perro de Hagrid, le revoloteaba alrededor muy intrigado olfateándolo.
Harry pensó que era simpático, si no se tenía en cuenta su feroz mandíbula, de la cual surgía un líquido gomoso que parecía ser saliva, y sus grandes uñas capaces de partir a cualquier hombre en miles de pedazos. Pasaron algunas semanas y el misterio de la enamorada de Harry seguía vigente. Había recibido para esa altura más de 12 cartas y todas eran anónimas. Harry no sospechaba quien podía ser su autora (esperaba solamente que no fuese Myrtle) pero por si acaso, cada vez que veía a Cho o a Ktrin , que se había hecho muy popular en el colegio, esbozaba una ridícula sonrisa, mezcla de galán superado y tímido reprimido.
Ron, no podía aguantar la risa cada vez que Harry lo hacía, y es que era más que evidente que debía quedar como un ridículo.
Además, algunas chicas de primero lo miraban de una manera muy especial y para que no lo tomaran desprevenido, también les sonreía a ellas.
Harry daba una postura de desinterés en conocer a su enamorada pero la verdad es que la duda lo estaba carcomiendo.
Wood les dijo que buscarían a un nuevo Guardián y que el tenia muchas veces que ausentarse para los entrenamientos y alguien que lo sustituya en algunos partidos, la selección comenzarían al día siguiente debido a que se acercaba la fecha de los partidos y necesitaban y lo necesitaban para el primer partido.
-¿Por qué no te presentas? Serías un buen guardián para Gryffindor -le dijo Harry a Ron
-¿Tu crees?, ¿crees que me darán el puesto?
-Con intentarlo no pierdes nada, además, si haces un buen trabajo, serás famoso y las chicas te perseguirán por un autógrafo...
No hizo falta ningún otro comentario. Ron corrió a anotarse en la lista de los que harían las pruebas inmediatamente Harry mencionó a las chicas y los autógrafos en una misma oración.
Al día siguiente, Wood convocó a todo el equipo de Quiddich de Gryffindor para reunirse en el campo de juego y así poder evaluar a los que solicitaban el puesto.
Todos se encontraban sentados en la parte baja de la tribuna entrevistando a cada postulante, mientras que Ron, esperaba ansiosamente para mostrar todas sus habilidades sobre la escoba el las gradas estaban Hermione y Ktrin, mas de uno de los postulantes se hacia el simpatico frente a ellas.
-Te has vuelto muy popular entre los chicos ¿No crees?.- Le decía Hermione mientras que miraban el campo.
-La verdad no es algo que me importe mucho, todo viene de herencia mi abuela era una veela (así se le llamaba a una raza de brujas que tenia una apariencia de una ninfa y poderes de un mago, son una rara raza)
-Y tu que Hermione ¡que pasa entre tu Harry y Ron? Estáis muy unidos.
Justo en ese momento Ron se subía a su escoba, era su turno para la prueba.
-Ahhh! -dijo Fred cuando lo vio a Ron -no se por qué pero este chico me resulta extrañamente familiar.
-Haber chico, dinos por qué quieres entrar en el equipo, ¿te consideras un ganador merecedor de ese privilegio? -continuó burlándose George.
Ron balbuceó un par de veces pero luego dijo decididamente:
- Sí, por supuesto. Soy un Wesley y la sangre ganadora corre por mis venas -dijo Ron con la frente bien alta del orgullo -si me toman no defraudaré su confianza.
- ah, por lo menos tiene confianza en si mismo, eso me gusta -prosiguió Fred - Haber chico, prepárate para darnos una demostración en la escoba.
-Sí, Angelina, ¿podrías por favor hacernos el honor de probar las habilidades de este joven?
Angelina Jhonson se levantó de la tribuna y se montó en la escoba. Ron la siguio y se preparó para detener todos los tiros que la cazadora Gryffindor le arrojase...
Ron tomó vuelo y se ubicó justo delante de los postes de Gryffindor, donde la cazadora Angelina Jonson le arrojaría unos tiros con la quaffle (una de las pelotas usadas en el Quiddich) y probaría si Ron era merecedor del puesto de Guardián de los postes del equipo.
Desde abajo se oyó un silbato que significaba que debía comenzar, y Angélica, con la precisión que la caracteriza, le arrojó la quaffle a Ron con todas sus fuerzas. No le costó mucho trabajo a Ron atrapar la pelota en aquella oportunidad, ni tampoco el hacerlo unas 20 veces más cuando todo el equipo de Gryffindor se dispuso a vencerlo y a anotar.
Era bueno, realmente bueno. Tenía técnica y una habilidad que no habían visto. Harry no había imaginado, ni siquiera cuando le había propuesto anotarse en el equipo, que Ron era tan bueno como guardián.
Quedó elegido de inmediato, e incluso los demás solicitantes del puesto, que no habían quedado, lo aplaudieron por la excelencia de su actuación.
Ron estaba hinchado de orgullo y Harry jamás lo había visto tan alegre y contento en los casi 5 años que lo conocía.
Ahora, ambos estaban en el equipo, había demostrado ser tan bueno como Harry y eso, tal vez, mejorara un poco la relación que había entre ellos. Al menos eso fue lo que pensó Harry.
Desde aquel día Ron se manejaba por el colegio con un porte especial, incluso cuando Malfoy y sus amigos se detuvieron en el vestíbulo para preguntarle, de muy mala manera, si es que la familia Wesley había pagado para tener a todos sus integrantes en el equipo. Ese tipo de comentarios no se hizo esperar y menos de los miembros de la casa Slytherin que no desaprovechaban la oportunidad de humillar a Ron y a Harry cada vez que podían.
El resto de las casas, sin embargo, no compartían su opinión: felicitaban a Ron a cada momento y le daban buenos augurios para el campeonato, el cual según la mayoría, ganarían sin esforzarse demasiado.
Nadie sabía como jugaba Ron, ya que las elecciones para el puesto de guardián se habían hecho a puertas cerradas y los únicos que conocían su talento eran los miembros del equipo.
Harry y Ron se sentían más unidos que nunca, y debido a esto, hicieron un juramento por demás importante: iban a patear el trasero de cada miembro de la casa Slytherin y derribarían a Malfoy de la escoba en el primer intento que tuvieran.
Los entrenamientos habían comenzado y mas duros que nunca. Harry había logrado atrapar la Snitch 9 de las 10 veces que habían jugado porque el último partido había sido suspendido por una lluvia muy fuerte y que los lanzaría de la escoba.
Ron cada vez era mejor, ya conocía prácticamente el destino de la quaffle antes de que se la arrojaran, tenía lo que se conoce como un sexto sentido.

Hagrid permaneció viéndolo hasta el final del ultimo entrenamiento antes del partido. Harry descendió de su escoba y se encaminó hacia él.
- Hola Hagrid ¿como estás? -preguntó algo ansioso
- Muy bien, aunque no tanto como tú jugando al Quiddich según veo -contestó.
Harry asintió algo incrédulo y se dirigió, con Ron, hacia el castillo, de camino vieron al padre de Draco, eso no era bueno pero también puede que haya ido a ver a su hijo antes del partido.
- Hey, Ron, ¿mira el padre de Malfoy?
-Si que estará haciendo aquí?
Harry, decidió no hacer caso de sus pensamientos y seguir su camino al castillo, era evidente que si algo pasaba, debía de ser efecto de su gran imaginación. Tantas veces habían vivido situaciones desagradables que ya estaba viendo visiones...